martes, abril 24, 2012

xxxv Rock 'n' Roll Madrid Maratón.


Desde agosto del 2011 que corrí la última maratón bajando por fin de las tres horas, no he vuelto a entrenar debido a unas molestias en el tendón rotuliano, glúteo, ísquios...de la pierna derecha.
    
En otoño y muy de vez en cuando aun hacía algún entreno tranquilo y de cara a la San Silvestre Vallecana parecí mejorar y la última semana salieron un par de entrenos buenos, la carrera....pero a la primera tapia paré en seco de nuevo a aumentar las molestias de glúteo y cadera.
   
El parón esta vez ha sido más serio y aunque al principio seguía entrenando a bajo ritmo, pocos días...al final acabé parando del todo hasta la última semana pre-maratón en la que salí dos veces unos 10 km y el mono que tenía me hizo participar, no quería perderme la primera Róck ´n´ Roll Madrid Maratón y no me arrepiento.
Acudí a primera hora con mi habitual día previo a base de Tarta de Santiago, pasas, Bollo de chocolate...no comer pasta sigue pesando como una losa.
En Cibeles (semana grande para La Cibeles je....) me esperaba el grupo y tras varios meses sin verlos me sentí de nuevo atleta. Abrazos, fotos, charlas, retos ante la maratón..., echaba de menos comenzar un domingo de la mejor manera.
 
Allí estaban los Chavales de la Tapia casi al completo, exceptuando excepciones justificadas y comenzando una fiesta que terminaría comiendo todos juntos allí cerca gracias a Pichi que cada año nos hace el honor, espero acudir el año próximo, este me pusieron falta.
En la salida elegí grupo para hacer 3:30, otra cosa sería una locura, y junto a Jorge, Panda, Jesús, Rafa, Alberto...fueron pasando los primeros km, delante iban algunos tapieros buscando bajar de las tres horas, otros 3:15...y detrás el resto, la mayoría con el reto de las cuatro horas o terminar su primera maratón y en casi todos los casos se cumplió el reto.
La salida fue muy apretada, sigo sin estar acostumbrado, y fuimos subiendo hacia Plaza Castilla muy cómodos rondando siempre los 5´/km y poco a poco y hasta volver a cruzar la Castellana tras bajar por Príncipe de Vergara fuimos aumentando el ritmo para tener un colchón en los km finales.
  
Ya en la zona de Cuatro caminos Alberto comenzaba a sufrir y decidí seguir a su lado, mi cabeza sabía que quedaba mucho y mi preparación era nula.
  
A partir de ahí, vuelta a descender por Islas Filipinas, Guzmán el Bueno, Fuencarral..., todo muy lleno de gente, mucho ambiente con los conciertos de la organización, familias de uno y otro con pancartas, fotos.., Raquel o Pepe y familia animando como siempre..., es la zona donde más disfrutamos dejándonos llevar por debajo de 4:30 a veces.
 
Llegó Sol, Calle Mayor, dónde Alberto se casa en un mes..., el Palacio Real... y por fin nuestra Casa de Campo, las fuerzas iban ya justitas y junto a Alberto y apoyados ahora por Raúl y Fran comenzaba lo duro.
 
El principio de los problemas llegaba tras pasar el Lago sin desayunar je,je,je,ej...y comenzar las cuestas, la zona de menos público, Madrid Río...y los primeros síntomas musculares, pensaba en dejarlo, no por fuerzas ni cabeza si no por evitar riesgos, pero pensar en mi familia esperando me motivaba.
 
Entonces adelantamos a Jorge nada más pasar el Lago ( te debo una y aún lamento no quedarme a su ritmo ) que sufría como nosotros, pero se superó completando otra gran carrera.
Km tras km las molestias del gemelo acabaron controladas a base de spray, pero los cuádriceps molestaban más y más...y ya no me dejarían disfrutar ni un km más, aunque tampoco me hicieron abandonar y eso me bastaba para seguir con Alberto, a quién Raúl llevaba a volandas hacia la meta, no le quedaba otra ja,ja,ja...
  
Desde allí ya dirección única hacia Atocha, sufriendo y disfrutando como maratonianos de ello. Comenzamos a subir hacia El Ángel Caído incluso andando y mientras rodeábamos El Retiro mis cuádriceps dijeron "basta" y tocaba andar de nuevo mientras veía que Fran, Alberto y Raúl luchaban ese último km, yo tenía claro que tenía que llegar.
  
Vuelta a correr y esta vez al contrario, Alberto andaba y los alcancé para entrar juntos de nuevo en El Retiro con todo el trabajo hecho y una larga recta por disfrutar y más sabiendo que me esperaba mi familia junto a la valla.
  
Me costó verles, escuchar sus palabras de ánimo ( me veían tan fresco...¡uffff! que dolor de piernas).., por fin en meta entramos los cuatro maratonianos juntos y pudimos descansar y contar y escuchar las aventuras de cada uno.

Esto se ve mejor en las fotos, yo ya solo pienso en abril del 2013.

Enhorabuena a la organización, avituallamientos...un 10.










Junto al Retiro ya no notaba molestias, entrar en meta me dió fuerzas.
















Celebrando terminar enteros.


Dos al paso de la Media Maratón, enteros y en tiempo aún para las 3:30 horas.





Con Álvaro y arriba además Joaquín, Fran, Álberto y Raúl.